El interiorismo de los años 90
Cuando en decoración hablamos de adaptación del espacio o acondicionamiento, hablamos de interiorismo en su término académico. El interiorismo se define como una disciplina artística destinada a acondicionar y decorar los espacios interiores que crea la arquitectura.
En términos generales, el interiorismo se define como un arte y es que este surge a partir de la creatividad y la imaginación de un ser humano, el diseñador de interiores. Éste profesional utilizará los espacios que crea la arquitectura como modo de expresión y los preparará en función de las necesidades de las personas.
Quiero dedicar estas primeras líneas de este artículo a una cita de Yves Saint Laurent, que decía que ‘las tendencias desaparecen, el estilo es eterno’. Algo así ha sucedido con la década de los 90 y el diseño de interiores. Lo cierto es que cada década o momento histórico se reconoce por sus tendencias, son estas tendencias las que configuran un estilo y lo hacen perpetuar en el tiempo.
Resulta increíble pensar que algo tan efímero y largo en el tiempo pueda mantenerse, pero es una realidad. El interiorismo de los años 90 ha vuelto y lo ha hecho por la puerta grande. Ahora fascina a todos y lo hace en un momento en el que la vanguardia parecía haber tomado la delantera. Pero, ¿sabes que define el interiorismo de 1990? Te lo cuento.
Características del diseño de interiores en la década de los 90
Tras unos tumultuosos años 80 a nivel político, cultural y social, los diseñadores decidieron poner el freno y acabar con los excesos de la década anterior. El pensamiento adaptado fue el del retorno al minimalismo, a espacios puros y limpios, mobiliarios con líneas simples y alejadas de todo exceso. Algunas de las características que definieron estos años a nivel decorativo fueron las siguientes que te cuento a continuación:
Papel pintado floral
Si algo caracterizó el interiorismo de los años 90 fue la sustitución de la pintura por el papel pintado para las paredes de los hogares. Papeles cuyos motivos decorativos eran florales, dándole a la estancia una sensación mucho más natural.
Suelos de madera
Los suelos solían cubrirse con madera y es que en estos años el pino claro era un material muy empleado.
Tonos neutros
El interiorismo de los años 90 utilizó una gama cromática muy alejada de los colores que predominaron en la década anterior, los colores neón. Ahora en estos años la paleta se vuelve más sosegada, más pura aunque sin renunciar al color, como ocurría con el azul, muy empleado en estos momentos. Los colores predominantes eran el beige y el blanco.
Decoración campestre
En la década de 1990 era habitual encontrar una decoración propiamente del campo, con techos muy altos, realces en metal, alfombras cubriendo paredes, lámparas imponentes, de cristal o adornadas con tulipas, y grandes ventanales de cristal. La tendencia parece volver a estar en vigor.
El interiorismo de los años 90 por estancias
Si analizamos un hogar de los años 90 nos encontraremos con estancias muy concurridas y pobladas tanto en mobiliario como en tema ornamental. Quiero mostrarte ahora como eran las cocinas, los salones y las habitaciones de las casas de 1990.
Cocinas blancas
La cocina fue una de las estancias que más cambios experimentó con la llegada de la nueva década. Comenzaron a emplearse las paletas cromáticas blancas para representar la higiene y la limpieza.
En cuanto a los materiales, empezaron a emplearse algunos tan de hoy día como el granito y el mármol amparados por su elegancia y durabilidad, y aparecieron los toques en acero inoxidable para dar un repunte de brillo metálico. A finales de la década llegaron las primeras cocinas con islas centrales, tan frecuente en la actualidad pero que beben del interiorismo de los años 90.
Salones y comedores de gran lujo
El salón era la estancia más importante del hogar y como tal así era tratado y cuidado. De la misma forma que te he contado con anterioridad como estos espacios pueden acondicionarse para recibir a nuestros invitados, en esta década eran tratados de la misma forma.
Este espacio se utilizaba para exhibir los mejores muebles y elementos decorativos, primando en este sentido los cuadros, los espejos o las antigüedades. El salón se completaba con alfombras, grandes y voluminosas cortinas y camillas con faldas. Eran habituales como característica del interiorismo de los años 90 encontrar salones y comedores con aparadores y alacenas para conservar en ellos la mantelería, las vajillas, las cristalerías y las cuberterías.
Dormitorios acogedores
Los dormitorios trataban de ser acogedores, elegantes y sencillos. Era muy frecuente encontrar habitaciones donde las camas tenían doseles y cabeceros acolchados, muebles de madera, dando prioridad a lo natural, y unas tonalidades neutras.
Como te cuento, las modas fluctúan y el interiorismo no es menos. Así los años 90 parecen estar de regreso y desde mi experiencia puedo ayudarte a dotar a tu hogar de ese toque a antaño sin renunciar a la vanguardia y las comodidades.