Niksen: el arte de no hacer nada

¿Alguna vez has oído hablar de Niksen? Pues no es una persona, ni una película, ni tampoco una serie de Netflix de esas que te hacen disfrutar esos días cuando hace frío o llueve… se trata de un concepto.

Algunos lo llamarían excusa, los holandeses concepto.

Niksen es un concepto, un arte y fue exportado desde la tierra de los tulipanes para todos nosotros. Este concepto holandés se ha convertido en un top tendencia como consecuencia de la pandemia y de las horas que nos hemos visto obligados a pasar en casa. Pero, ¿sabes exactamente en qué consiste?  Explicado de manera sencilla, se trata de no hacer nada. Y de no sentirse culpable por el hecho de estar sin hacer nada.

Parece que los holandeses estaban estresados, agobiados y descontentos pero tomarse un break no les ayudaba a mejorar ya que les hacía sentir mal. Por eso decidieron crear un concepto para esos momentos en los que no hacer nada es necesario.

Si eso es lo que vas a hacer este puente, tranquila.

Si sólo vas a dedicarte a leer ese libro que te gusta y no piensas ni acercarte a la pila de ropa por planchar, tranquila.

Si hace mucho que no vas al gimnasio, tranquila.

Durante este puente vas a ejercitar tu derecho a no hacer nada. Nada en absoluto. 

Niksen.

Niksen, es un concepto orientado al bienestar, como el hygge. Una manera de definir eso que nos hace sentir bien, ese algo que flota en el ambiente y que llamamos “pequeños placeres de la vida”. Es dedicar tiempo a aquellas cosas que te producen placer. Cada uno tiene las suyas: tomarse una copa viendo el atardecer, disfrutar de tu serie favorita, hacer yoga,… (Ya me entiendes)

Mi placer de hoy, mi hygge, es tomarme un café con aroma a vainilla mientras escribo este artículo en la cubierta de mi barco. (Muy placentero, lo aseguro)

El Niksen va más allá. Consiste en disfrutar de no hacer nada. O sea, de disfrutar de la inactividad de manera consciente. Es educar a tu cerebro en que no hacer nada está bien para trabajar en contra del estrés. Busca educarlo para convencer al cerebro de que la vida  no es correr y que estar todo el día acelerado no es lo que debe ser. Lo normal.

Y es que en esta sociedad en la que vivimos, yo a veces  me pregunto ¿Estar estresado es símbolo de estatus social? ¿De estar aprovechando más el tiempo?

O más bien ¿Nos hemos metido en una rueda (como los hamsters) y nos pasamos el día corriendo sin mirar atrás mientras la vida pasa delante de nosotros?

Otro caso es el de esas personas que tienen más tareas que tiempo disponible y por mucho que corran, se organicen y sean súper eficientes, siempre están a la carrera. Siempre sobrecargadas y sobrepasadas.

Por esa razón los holandeses, muy listos ellos, crearon un nombre para lo contrario. Descanso, paz…sin remordimientos.

Para algunos contemplar el cielo puede ser una pérdida de tiempo, para otros una terapia détox 100% necesaria, pero esa es la gran cuestión de nuestra época.

¿La vida mola por lo que haces o por lo que eres capaz de disfrutar haciéndolo?

C’est la question.

Yo la verdad no creo que esto trate de hacer el vago, más bien de dedicar tiempo y energía a ralentizar la carrera, por decirlo así.

A dejar que se derrita el helado, que no pasa nada. Luego, también se puede comer y a veces sabe incluso mejor.

En contra de lo que muchos pueden pensar, tener estos periodos dedicados a no hacer nada, puede ayudar y mucho en campos como la creatividad, la solución de problemas y la eficiencia cuando te reactivas.

Todos necesitamos esos momentos détox.

Nuestro cerebro necesita esos momentos détox.

Sentarte en un sofá, como fuente de lucidez.

20 minutos al día es suficiente.

Mira estos sofás y ponte a practicar el Niksen.

Sofá Jaey de Zuiver: Sofá de 2 o 3 plazas tapizado con marco de madera de pino y patas de acero negro en el que no hacer nada. Se fabrica en 4 colores.

Sofá Houda de Dutch Bone: Sofá de 3 plazas  en el poder pensar o mirar por la ventana. Sofá de terciopelo fino y estructura de madera.

Sofá Bobby de Casual: Un sofá cómodo, mullidito y lleno de ese aire de “estoy listo para hacerte no pensar”.

Sofá Dolores de Crisal Decoración: Sofá de cuero, con aire vintage. Retro. Vamos que el mismo te lleva a otra época, una en la que abrir el ordenador no era lo primero que se hacía, más bien se cogía un abrecartas cuando el cartero te dejaba un buen manojo de lectura gratuita.

Mammoth Sofá de Terciopelo de Norr11: Sofá Mammouth de 2 plazas, diseñado por Rune Krøjgaard y Knut Bendik Humlevik. Daneses convencidos de que en su diseño vas a encontrar el “relajo” máximo.

Cómo conseguir el Niksen

Es curioso pero para conseguir el resultado que buscas, se necesita práctica. ¿Por qué? Pues porque estamos acostumbrados a correr todo el día, a las mil tareas pendientes, a sentirnos valiosos por hacer reuniones por videollamada mientras estás de camino a otra reunión… por vivir estresados. (Digo equivocados).

Para romper con todo eso y empezar a ganar en calidad de vida te doy algunos consejos, que como todo, necesitan constancia y voluntad.

·   Conciénciate de dedicar tiempo al día a no hacer nada

·   Haz la lista de las tareas que te resultan más placenteras y a las que vas a dedicarle tu Niksen.

·   Aprovecha ese rato entre tareas para dedicarlas al Niksen en lugar de aprovechar para repasar el correo electrónico.

·   No tengas miedo al responder “absolutamente nada” a la pregunta de qué estabas haciendo.

·   Sobre todo, no te desanimes a las primeras de cambio, porque a veces a nuestro cerebro le cuesta entender que estas actividades están dentro de la zona de confort. Sorprendentemente, el relajo le genera estrés.

¿Como?

Como puedes ver, no hacer nada tiene sus beneficios y su trabajo implícito para conseguirlo. Lo más importante de todo esto es no dejarse llevar por el estrés y las obligaciones. Disfrutar de sus beneficios y adaptarse a un nuevo estilo de vida tal y como hicieron los holandeses en su momento.

Deja atrás ese no parar enfermizo y desconecta.